Una publicación de la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante

Entrevistas

Manuel Mira Candel irrumpe en el género del thriller con “Las zapatillas vietnamitas”

Manuel Mira Candel.

El escritor alicantino Manuel Mira Candel, Premio Azorín 2004 por “El Secreto de Orcelis”, tras el éxito de su última novela “Esperando a Sarah Miles en la playa de Inch” (que aparecerá en breve en versión inglesa), irrumpe por primera vez en el género del thriller con la novela “Las zapatillas vietnamitas”. Nos encontramos ante una novela larga, de más de 500 páginas, que ha despertado un gran interés en la editorial por su temática actual, el marco europeo en el que se asientan cada vez con más fuerza los movimientos ultraderechistas.   

Mira Candel nos comenta que “la temática de la novela está relacionada con la historia de un hombre corredor de maratón al que un grupo de policías europeos, una brigada policial estructurada ad hoc, le encarga una misión importantísima: desenmascarar a una serie de miembros de partidos neonazis ultraderechistas de Europa y América que corren como él maratones y que utilizan el mismo tipo de zapatillas. Ese hombre llevará a cabo esa difícil misión”.

En breve aparecerá publicada en versión inglesa su obra “Esperando a Sarah Miles en la playa de Inch”

Un argumento curioso que nos desvela en parte su autor para que no pierda interés el conjunto de la obra hasta que esté a la venta: “Aunque no puedo correr por problemas cardíacos si he seguido muchos maratones desde hace años en muchos países. La novela está estructurada en 42 capítulos y 195 metros cuadrados (la prueba deportiva es de 42 kilómetros y 195 metros). La novela se encuentra en estos momentos en máquinas para su edición. Es una novela que da mucho juego y en la que pasan muchas cosa. Como en todas mis novelas siempre hay un protagonista periodista. En este caso, la mujer del corredor es Amalia van Campen, una periodista holandesa que, a su vez, es criptóloga-analista. Hay además personajes muy interesantes. El papel de Amalia es clave, ya que los corredores encriptan sus mensajes en un chip en las zapatilla en las grandes pruebas.  La novela tiene un gran interés porque se conceptualiza en la situación política de toda Europa con la emergencia de los partidos neonazis, un fenómeno muy vivo en Austria, Hungría, Alemania, Holanda y ahora mismo en España. Esta previsto que aparezca a finales de febrero o principios de marzo”.

El escritor y periodista nacido en Orihuela en 1945 y que ha cultivado la mayoría de los géneros literarios (novela, teatro, ensayo histórico, el cuento o la biografía) no oculta su satisfacción por el éxito alcanzado por  “Esperando a Sarah Miles en la playa de Inch”. Con una prosa exquisitamente labrada y precisa, conmovedora y apasionada, el autor nos abre un camino de luz hacia la redención del ser humano por el amor.

Con Rosalía Mayor, la presidenta de la APPA, el día de la entrevista (Fotografía: Alfredo Fernández).

La imagen de La Hija de Ryan

“Ante la salvaje playa de Inch, península de Dingle, Irlanda, escenario del film La Hija de Ryan, que ha visto decenas de veces, Humberto Narbona espera la aparición sobrenatural de Sarah Miles, la actriz que encarna a Rosy Ryan. Las secuelas de una aguda crisis neurótica por la infidelidad de su mujer, Olivia, han marcado los últimos años de la vida de Humberto, obsesionado por identificar la traición de Rosy en la película con la de Olivia en la vida real, confundiéndolas hasta creer que son solo una mujer. Sueños, locura y esperanza se sustancian en la tragedia de un hombre enfermo de amor”.

Sobre el origen y la génesis de la obra, Mira Candel nos precisa que “yo estuve en la playa de Inch, que está localizada en Irlanda y que hizo mundialmente famosa el director de cine David Lean en la película La Hija de Ryan. Estuve en esa playa porque yo quería escribir un cuento. He visto como siete u ocho veces la película . Le dije a mi mujer quiero cumplir años en esta playa. Hicimos un recorrido por toda Irlanda. Era un día gris, tormentoso y me presenté en la playa, completamente vacía, una playa selvática pero preciosa.  Me pasé un par de horas, pisando la arena y muy emocionado, me fui al hotel y empecé a escribir un cuento. Y al cabo de dos o tres meses, en casa, pensé, este cuento puede dar de sí mucho más de lo que es inicialmente. A partir de ese momento lo que era un cuento lo transformé en novela. La están traduciendo en estos momentos y en breve aparecerá en versión inglesa”.

Recorremos la reciente trayectoria de Mira y nos detenemos en “El olivo que no ardió en Salónica”. La historia épica de la saga de sefardíes españoles que sobrevivió a seis guerras y construyó el imperio Danone. Una novela apasionada y honesta, con un matiz de cautivadora melancolía. Un deslumbrante relato sobre la infinita capacidad de soñar y de sufrir del ser humano. Apoyándose en una vastísima base documental, Manuel Mira Candel desciende al infierno de la Europa en llamas de la primera mitad del siglo XX para alumbrar los enigmáticos orígenes de la familia Carasso, sus huellas en España y Francia, y abordar temas que trascienden su propia historia: la tragedia nacionalista en el viejo continente, la palpitante nostalgia en el corazón de la memoria y el anhelo por una tierra que sigue sin reparar el daño causado a los españoles sin patria.

El escritor alicantino recibió el Premio Azorín en 2004 y, en 2015, fue galardonado con el Dino Buzzati por “El olivo que no ardió en Salónica”

“Es un libro que va muy bien y se sigue vendiendo”, nos apunta el escritor. “La novela fue presentada en Tel Aviv, donde fuí invitado por el Instituto Cervantes asentado en esa ciudad. Me encontré con personas que hablaban ladino y que me entendían. Hubo una anécdota curiosa y es que una señora, que estaba en la primera fila, al final del acto, se puso a llorar. Yo me acerqué a ella y le pregunté ¿qué le pasa señora? Nada especial, me contestó, de la emoción que me da escuchar a una persona que habla en mi mismo idioma”. Con esta novela obtuvo el Segundo Premio Literario Internacional Dino Buzzati en 2015 

Biografía del creador de Mercadona

Mira no se cansa de seguir escribiendo. “Algo hay que hacer en esta vida”, apunta el escritor y miembro de la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante, de la que fue presidente entre 1984 y 1985. Ha escrito hasta una biografía no autorizada de Juan Roig, el fundador de Mercadona, titulada “El emprendedor visionario”, en 2013, uno de los hombres mas poderosos e influyentes del país. “Ahí tuvo muchos redaños la editorial. Si tu haces una biografía autorizada y te permiten hablar con la persona te conviertes en un negro. En este caso yo no hablé con él y personalmente no le conozco. Tuve que ingeniármelas y hacer un trabajo de campo inmenso. Me pasé año y medio recopilando información, hablé con 150 personas. Un auténtico trabajo periodístico. Y salió un libro que perfila bastante bien la personalidad de este hombre tan especial, interesante y entregado a su trabajo, muy impenetrable, inaccesible. Pero no debemos olvidarnos de que Mercadona es él y el éxito es de él”.

Una obra de trago corto

Nos detenemos en la entrevista en “El Apeadero”, de 2012. “Me abre la puerta una mujer de cara redonda”. Con estas palabras se inicia en ‘El Apeadero’ la insólita travesía del ingeniero Álvaro Sotomayor rumbo a Maldinuera, un villorrio que no figura en los mapas ni en los GPS. Atrapado por esa cálida invitación que le susurra la primera persona del narrador, el lector se entregará generosamente a participar en la búsqueda del presente que le agobia y del pasado que ha muerto, sin saber si avanza en el mundo absurdo en el que vive o retrocede hacia leyendas arruinadas”. Continúa Mira: “Yo tengo un cariño y un afecto especial hacia esa novela corta. Había escrito hasta entonces libros muy largos, como ‘El Secreto de Orcelis’ (la razón de ser de por qué estamos aquí), 400 páginas; ‘Ella era Islandia’, más de 400. Me decían cariñosamente algunos compañeros periodistas que era un escritor de trago largo. Ésta es en cambio una novela de trago corto, una metáfora de lo que es España con el crecimiento descabellado de las ciudades en coexistencia con la España vaciada”.

En el caso de “Yo era Islandia” (una parábola sobre la crisis global: tres personajes abandonan su mundo y se pierden, a bordo de un bacaladero, en el Ártico en busca de una isla a la que nunca se llega, ha sido revisada por el autor y actualizada y se ha publicado recientemente. Tras recuperar los derechos de autor de esta obra, se ha distribuido en Amazon, en Google y más adelante se podrá encontrar en la Casa del Libro.

En “El Secreto de Orcelis” nos conduce a Bartolomé Arango Moya, el hombre más poderoso de la ciudad levantina de Orcelis que muere unos años después de la Guerra Civil, en un asilo, tuberculoso, postergado por sus amigos y familiares. El escritor Teodomiro Arango decide descubrir el enigmático submundo de aquel hombre, su abuelo.

Manuel Mira a punto de dedicar una de sus novelas.

El papel de escritor

Mira Candel lleva sus reflexiones humanas a un papel vacío bien en la maquina de escribir o con una pluma porque la palabra escrita recorre toda su sangre. Le devora el pensamiento y transcribir esos planteamientos al lenguaje escrito. “El día que me pare y no escriba un libro me habrán enterrado. La vida hay que tomarla como un trabajo permanente. Una lucha constante del ser humano por perdonarse a sí mismo y la capacidad de búsqueda de la redención. Todo esto se resuelve mediante el trabajo. Trabajo todos los días, incluso sábados y domingos. Mi curiosidad me lleva a viajar mucho. En los últimos 18 meses he estado en Canadá, China, Japón, Corea y Egipto”.

En muchas de sus obras hay mucho trabajo de investigación y recopilación de datos, en lo que le ha ayudado sin duda su profesión periodística. “Nunca hubiera sido periodista sin querer ser escritor. Yo accedí a la profesión periodística porque quería escribir y pensaba que la mejor forma era la de ser periodista. Estudié periodismo en Madrid y a los 19 años me contrataron en un periódico y desde entonces empecé a trabajar. Terminé la carrera pero ya estaba trabajando. Nunca hubiera llegado a ser escritor sin haber sido antes periodista. La condición de periodista me ha servido mucho para saber lo que es la investigación, la curiosidad innata del ser humano para poder descubrir cosas que no conoces”.

«La condición de periodista me ha servido mucho en la labor de investigación y esa curiosidad innata para poder descubrir cosas que no conoces»

Manuel Mira

Nos encontramos ante un hombre cultivado que ha leído mucho en un mundo cada vez más proclive a la imagen y en el que cada vez se lee menos. “El prolífico autor norteamericano Stephen King solía decir que para ser escritor había que escribir 8 horas diarias, leer 8 horas diarias y dormir las otras 8 horas restantes. Era una exageración, una hipérbole para recordarnos que era imprescindible leer mucho y escribir mucho. Yo en la medida de lo posible procuro hacerle caso”.

Literatura basura

No duda de que en los nuevos tiempos estamos pagando socialmente el abandono de la lectura tradicional de autores nobeles con fundamento o clásicos. “Ahora, el hecho de que las editoriales abran sus puertas a todo tipo de escritores ha hecho que la lectura y la escritura se hayan abierto de un modo extraordinario. Todo el mundo lee, pero el 95 por ciento son libros basura. Lo que a primera vista parece una virtud, al final se convierte en un enorme defecto. Mi agente literario me dice que estaba maravillada porque había ido a una feria del libro y las únicas colas que había en las casetas eran las de los youtubers y los influencers. Entonces te encontrabas con niños de 14, 15 y 16 años comprando libros del youtuber o influencer correspondiente que había escrito otro libro.  Y se quedaba maravillada pensando cómo estos niños puedan comprar esta basura”.

Destacamos también en su trayectoria literaria la novela “Madre Tierra”. Al galope de un caballo negro y esgrimiendo un herrumbroso sable, un soldado sudafricano arremete contra los tanques del Afrika Korps en el frente de El Alamein durante la Segunda Guerra Mundial. A Ken Brighton, corresponsal de guerra del The New York Times, le asalta el presentimiento de que ese jinete enfebrecido es su admirado amigo Pedro Anciles, a quien conoció años atrás en el puerto de Alicante, en los días agónicos de la Guerra Civil.

Presentación de la novela «Madre tierra».

No nos olvidamos tampoco de su ensayo “Crónica de una transición”, el largo camino del CEU a la Universidad de Alicante, que coincide con el de la Transición Política Española. 

Junto a esta extensa carrera literaria, Mira Candel nunca ha dejado la pluma descansar para escribir un artículo o una opinión como fiel cumplidor del oficio. En su dilatada carrera como periodista ha sido desde corresponsal en el extranjero hasta director de medios, creador de empresas periodísticas y columnista en los diarios La VerdadInformaciónABCLas Provincias y El Mundo.

Alfredo Fernández

Periodista.

1 Comment

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  • He leído casi todas sus novelas y «las zapatillas vietnamitas» es posiblemente la mejor novela policíaca española, escrita de una forma muy moderna y muy rápida. Te engancha del primer momento. Manuel Mira se ha adelantado a muchos acontecimientos mundiales, como la última crisis financiera, en «Ella era islandia». Como articulista de opinión debería tener una voz más frecuente en los periódicos. Hace falta gente con su formación que de opiniones certeras sobre qué nos está pasando en España.