Una publicación de la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante

Trescientas... y pico

Sonia Castedo, el regreso

Sonia Castedo (Fuente: COPE).

Faltan menos de dos años para las próximas elecciones municipales, pero en la ciudad de Alicante ya hay un runrún político que puede hacer saltar por los aires todas las cábalas, todas las quinielas electorales. ¿Volverá Sonia Castedo, la exalcaldesa, a encabezar una candidatura municipal? ¿Y si lo hace, lo hará sola o acompañada? ¿Qué consecuencias tendría su regreso para la propia ciudad?

Si en Alicante hay que apuntar un nombre que puede hacer saltar el tablero electoral –si finalmente decide y puede presentarse a esas elecciones– ese es, sin lugar a dudas, el nombre de la exalcaldesa Sonia Castedo. No es difícil imaginar que ella va a calibrar muy bien la oportunidad que le permitiría un tardío ajuste de cuentas (“El que me la hace, la paga”, dijo en una entrevista con elespañol.com hace apenas dos meses) y seguir limpiando su imagen.

Y vaya que sí, que desde su punto de vista, tiene muchas cuentas que ajustar tras once años de enjuiciamiento, de ser apartada del cargo de primera edil y sentirse abandonada a su suerte por el PP. Y eso tanto o más dentro que fuera de su propio partido. Ajustarle las cuentas a quienes ella cree la llevaron precipitadamente al borde del precipicio, también a quienes la empujaron para propiciar su caída, como a quienes la abandonaron finalmente justo ahí; y, en sentido contrario, agradecer, mientras ello sea posible, a quienes, pese a todas las evidencias, han permanecido fieles y creyeron en su inocencia judicial. Y aquí, la lista, me temo, es también larga. Muy larga.

Sonia Castedo a su llegada a la Audiencia Provincial (Fotografía: Álex Domínguez).

Si decidiese plantar batalla y proceder al ajuste de cuentas, según su propia expresión, dentro de su propio partido –cuestión improbable, pero no descartable– su nombre, esa sola posibilidad, podría reabrir heridas que estaban cicatrizando, en una batalla que se presume de todo tipo menos incruenta.  Si esas cuentas son fuera de las esfera del PP, ahí las cábalas permiten señalar que dependerá, y mucho, del poder que las urnas le otorguen.

Pero en un caso y otro, no lo duden, la lista de posibles ajusticiados en plaza pública será igualmente larga. Bien es cierto que ella, Castedo, no ha dicho aún ni sí ni no. Espera su momento. Prefiere que, mientras tanto, otros hablen por ella. aunque sea a base de banquetes de amigos y quedadas con Sonia.

La que fuera alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, que fuera juzgada como se sabe por corrupción y absuelta por la Audiencia de Alicante de varios delitos por su gestión al frente del Ayuntamiento, no tiene aún total vía libre porque la sentencia no es firme. Ese es, quizás, su principal inconveniente, el principal contratiempo, que, llegado el momento de formalizar la candidatura, no tenga aún vía judicial expedita y sus deseos de “ajustar cuentas” tengan que esperar otros cuatro años. Y, ya se sabe, que cuatros años en política son muchos años. O no, sobre todo si eres Castedo.

Sonia Castelo en TV (Fuente: Telecinco).

Es difícil, por tanto, imaginar que su candidatura pueda llegar a conformarse desde dentro del partido, de su propio partido, el PP, ese del que se reconoce abandonada, pero que sea difícil no quiere decir que vaya a ser imposible. Ella, conocedora de que la ambigüedad es ahora mismo su principal fortaleza, tampoco lo niega de forma categórica.

Posiblemente tal operación política –Castedo candidata del PP– sería como meter un caballo de Troya de consecuencias difíciles de prever y controlar, una operación que podría hacer estallar las costuras de un partido que, pese a todo, gobierna la ciudad, aunque su gobierno, bien es cierto, lo sea sin brújula ni timón reconocibles.

Descartada aquella opción le quedaría hacerlo desde fuera, encabezando una candidatura independiente, una especie de coalición electoral. Ahí es claro que le sería mucho más complicado poder gobernar y el resultado se presume mucho más incierto, pero en esta segunda hipótesis quizás no es descartable que pudiese obtener los suficientes apoyos para condicionar el futuro gobierno de la ciudad. Eso sería suficiente para llevar a cabo su plan. Amigos en esa incierta travesía tampoco le van a faltar.

La periodista del diario Información Carolina Pascual daba buena cuenta el pasado viernes del penúltimo banquete de adhesiones y de lo que se puede estar cociendo a fuego lento en su entorno con una pieza informativa con el sugerente titular de “Castedo vuelve por sus fueros”. Y los que la conocen, bien saben que los fueros de la ex primer edil alicantina no son fueros cualesquiera. Que lo suyo era –y seguirá siendo– más bien el ruido y la provocación, que su ascendencia política sigue ahí, y que su estrella mediática puede volver a relucir a poco que algunos astros se alineen en su favor.

Sonia Castedo (Fuente: Telemadrid).

Otra cosa es la ciudad. Las consecuencias de una vuelta como la de Sonia Castedo para una ciudad agotada, desnortada, sin un proyecto en el que mirarse, sin un plan de urbanismo que echarse a la boca, supondría, a buen seguro, un terremoto político de consecuencias devastadoras. Otra desgracia más. A poco que el futuro gobierno de la ciudad quedase en sus manos, o simplemente pudiese ser condicionado por su voto, no es difícil vaticinar que el centro de todos los focos volvería a girar hacia ella, que sería ella y su oscuro pasado, y no la ciudad, la que consumiría las energías que tanto escasean y que tanto se echan en falta.

Ella lo sabe y por eso juguetea con la posibilidad de volver. Seguramente, en una acto de generosidad inmensa su mejor contribución al bienestar y calma ciudadanos sería la de reconocer que esa puerta no debería volver a abrirse. Pero, seguramente, existe el riesgo de que eso pudiese ser interpretado por algunos como un tardío reconocimiento de una cierta culpa. Eso también lo sabe la propia Castedo. Y por eso mismo no resulta difícil de vaticinar que puesta en el dilema de si volver o no, sea el regreso la opción elegida.

Pepe López

Periodista.

Comentar

Click here to post a comment