Una publicación de la Asociación de Periodistas de la Provincia de Alicante

Medicina y Salud

Influencia de la adecuada limpieza de la boca en la capacidad cognoscitiva del anciano

Fuente: www.depositphotos.com.

Hace algún tiempo que pude escuchar e incluso leer datos sobre la relación entre la salud bucal y algunas alteraciones en la red cognoscitiva. Es este un tema muy interesante, pues vincula la salud bucal con el rendimiento cognitivo en adultos mayores. Y esa relación cognoscitiva me empuja varios años atrás y me lleva a recordar que fuera Murcia, y uno de sus importantes congresos de geriatría (que promovió la prestigiosa escuela de la Sociedad Levantina de Geriatría y Gerontología  —una asociación cada vez más reconocida en la literatura científica—), quien levantara la curiosidad del tema.

Y lo  dicen los expertos. Unos y otros apuntan a la epigenética y sus sistemas de acción. También lo que recogemos del medio ambiente, muchos factores que nos empujan a envejecer más aceleradamente, como, por ejemplo, La influencia de la adecuada limpieza de la boca en el buen funcionamiento de la capacidad cognoscitiva en el adulto anciano. Y otros meteorológicos (como el abuso del sol). Todos ellos sumados a  los que nos regalan los padres a través de sus genes.

Planteamiento del problema

La salud bucal ha sido tradicionalmente considerada un aspecto limitado a la estética o la masticación. Sin embargo, en las últimas décadas se ha evidenciado su influencia en la salud general y, particularmente, en la función cognoscitiva, aquella función por la que somos capaces de conocer, aprender, discernir, tanto como  bebes, como niños, como jóvenes o como adultos mayores.

Ya hemos discutido en esta sección de la Hoja del Lunes de Alicante que la vejez no es una enfermedad que acaba con la muerte. Esto es algo que me obsesiona y lo repito con frecuencia. La vejez es un acumulo de síndromes provocados por la decadencia de algunos órganos, que se ejecutan en unas y otras personas sin cumplir las mismas normas. Un desgaste que se proclama degenerativo, que se asocia uno a otro, unos empujados por otros, y que derivan en una progresiva e incesante pérdida de cualidades que se desarrollan a lo largo de la vida. Al final es una inhabilidad para adaptarse al medio ambiente. Pero no es una enfermedad.

En esta ocasión se me ha ocurrido pensar en la importancia del tema que voy a pretender exponerles. El mantenimiento de una higiene oral adecuada podría contribuir a prevenir el deterioro cognitivo (a mejorar la calidad del envejecimiento) al reducir procesos inflamatorios sistémicos y optimizar la nutrición y la calidad de vida.

Fuente: www.depositphotos.com.

Como sabemos, el proceso de envejecimiento es, en sí mismo, un deterioro progresivo que lleva asumido una serie de factores en el sistema digestivo: disminución de la capacidad de salivación, problemas dentarios, alteración motora que dificulta la deglución y el anidamiento de bacterias susceptibles de provocar afecciones en la cavidad oral. Bacterias que fácilmente pueden viajar a otras zonas del entorno, etc. Por ejemplo, la afección llamada periodontitis libera sustancias inflamatorias que son capaces de atravesar la barrera hematoencefálica y llegar a afectar a la función neuronal. En cerebros de pacientes con enfermedad de Alzheimer se pueden hallar algunos de estos gérmenes. La acumulación de placa bacteriana en el diente y la inflamación crónica, podrían inducir respuestas inmunes sistémicas que afectan al sistema nervioso central. Surge entonces la pregunta: ¿De qué manera la adecuada limpieza bucal influye en el buen funcionamiento de la capacidad cognoscitiva en el adulto anciano? El envejecimiento conlleva cambios  que pueden afectar la salud oral y mayor susceptibilidad a infecciones bucales.

Mantener la mente limpia empieza por la boca

Por todo esto, la higiene bucal diaria se convierte en una aliada inesperada del envejecimiento saludable. Cepillarse los dientes al menos tres veces al día, usar hilo dental y visitar al odontólogo regularmente son acciones sencillas que pueden mejorar tanto la salud física como la mental del adulto mayor. También resulta clave adaptar las rutinas de higiene a las limitaciones propias de la edad. Cepillos de mango grueso, enjuagues suaves o asistencia de cuidadores pueden marcar la diferencia.

Beneficios de la adecuada limpieza bucal

  • Prevención de enfermedades alrededor de los dientes.
  • Reducción de la inflamación sistémica.
  • Mantenimiento de una mejor nutrición y masticación eficiente.
  • Estimulación sensorial y cognitiva por la función oral activa.
  • Mejora de la autoestima y la interacción social.

Estrategias de intervención

  • Educación sobre higiene bucal en adultos mayores y cuidadores.
  • Uso de cepillos de cerdas suaves, hilo dental y enjuagues antimicrobianos.
  • Revisiones odontológicas periódicas.

Promover la higiene oral como parte del cuidado integral del anciano debe ser una prioridad en salud pública.

Una sonrisa que protege el cerebro

Cuando hablamos de salud mental en la vejez, solemos pensar en ejercicios de memoria, alimentación equilibrada o actividades sociales. Sin embargo, pocas veces reparamos en un aspecto que parece tan simple como fundamental: la limpieza de la boca. Diversas investigaciones demuestran que una buena higiene oral no solo mantiene los dientes y encías sanos, sino que también puede contribuir al buen funcionamiento de la capacidad cognoscitiva —es decir, de la memoria, la atención y el razonamiento— en los adultos mayores.

Lo que ocurre en la boca no se queda en la boca

La boca es una de las principales puertas de entrada al organismo. Cuando no se realiza una limpieza adecuada, las bacterias que se acumulan en la placa dental pueden provocar infecciones e inflamaciónes en las encías. Este proceso, conocido como enfermedad periodontal, no se limita al entorno bucal: las sustancias inflamatorias que libera pueden pasar al torrente sanguíneo y llegar hasta el cerebro. Además, la falta de dientes suele dificultar la alimentación, reduciendo la ingesta de nutrientes esenciales para el cerebro, como el Omega-3 o las vitaminas del grupo B.

Un hábito pequeño, un gran impacto

Cuidar la boca no es solo una cuestión estética: es una forma de proteger el cerebro. Promover la salud bucal en la vejez puede ayudar a reducir la incidencia de deterioro cognitivo, mejorar la autoestima y favorecer una mejor calidad de vida.

Así, cada cepillado se convierte en un acto de cuidado integral: un gesto cotidiano que mantiene la sonrisa… y también la lucidez. Un acto que deberíamos realizar tres veces al día (detrás de cada comida principal).

Síntesis de los antecedentes

La evidencia disponible respalda que:

  • Las infecciones e inflamaciones orales pueden tener repercusiones neurológicas.
  • La pérdida dental afecta la masticación y, por ende, la estimulación cerebral.
  • Mantener una higiene oral adecuada es un factor protector frente al deterioro cognitivo.
  • Promover programas de salud bucal en adultos mayores puede contribuir al envejecimiento saludable y activo.

Antecedentes bibliográficos

Diversos estudios internacionales han demostrado que la salud bucal influye de manera significativa en el bienestar general del adulto mayor, incluyendo su rendimiento cognitivo.

1-Ide et al. (2016). En una investigación publicada en Journal of the American Geriatrics Society, Ide y colaboradores analizaron a más de 500 adultos mayores y encontraron que quienes padecían enfermedad periodontal presentaban un riesgo significativamente mayor de desarrollar deterioro cognitivo leve. Los autores sugieren que la inflamación crónica de las encías podría contribuir a procesos neurodegenerativos.

2-Kamer, Pirraglia y Tsui (2015). En una revisión sistemática, los autores concluyeron que existe una relación bidireccional entre las enfermedades periodontales y el deterioro cognitivo: los problemas cognitivos dificultan la higiene oral, mientras que la inflamación periodontal puede acelerar la neurodegeneración.

3. Wu et al. (2016). En un análisis longitudinal con más de 4000 participantes, Journal of the American Geriatrics Society reportó que la pérdida de piezas dentales estaba asociada a una disminución del rendimiento cognitivo. La masticación deficiente, según los autores, reduce la estimulación sensorial cerebral y puede alterar el flujo sanguíneo en regiones relacionadas con la memoria.

4. Okamoto et al. (2019). Un estudio japonés publicado en Geriatrics & Gerontology International mostró que los adultos mayores que mantenían una buena higiene oral y conservaban la mayoría de sus dientes presentaban menor prevalencia de deterioro cognitivo y una mejor calidad de vida. El trabajo destaca la importancia de la higiene bucal como estrategia preventiva.

5-. González-Serrano et al. (2021). En un estudio hispanoamericano, se evidenció que la educación en higiene bucal y la atención odontológica periódica se asocian con una mejor función cognitiva global en adultos mayores institucionalizados, reforzando la importancia de integrar la salud bucal en los programas de atención geriátrica.

P.D.: Quiero agradecer a los avances tecnológicos de la IA por la ayuda en la obtención de algunos datos de este artículo.


Francisco Más-Magro Magro

Alicante (San Blas) 1946. Médico Gerontólogo.
Miembro de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, de la Asociación Gerontológica del Mediterráneo y del Ateneo Cultural del COMA. Ha publicado en diferentes revistas de poesía y prensa diaria, así como cuatro libros de índole histórico y biográfico y otros cuatro poemarios.
Es un médico que escribe.

5 Comments

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  • La boca es la antesala de la salud. Hay que hacerse una limpieza de boca periódicamente. Usar cepillo blando conjuntamente con cepillo eléctrico, cepillitos interdentales, e hilo de seda. Y revisiones en el dentista. Un abrazo.

    • Gracias. los Ángeles, como bien sabes, no precisan lavarse los dientes. Tampoco los veo escribiendonos algo. Son espíritus puros que están en nuestro escenario compartiendo con nosotros. Aunque no los veamos. Sí que es posible que algunas cosas buenas se realicen por inspiración de ellos. Podríamos discutirlo. ¿Será obra de ellos la inspiración que decimos? Yo no creo en las musas. Ahora bien, que los Ángeles nos ayuden un poco desde el otro lado…No sé…Para mí, ¿es más probable? Un abrazo.

      • Los ángeles custodios (cada uno tiene el suyo, incluso los no creyentes) están respaldados por la Biblia y por la tradición católica. Aunque parezca que pasan de nosotros algunas veces, al final me convenzo de que el mío ha tenido trabajo y me ha favorecido siempre. Santo Tomás de Aquino, que hablaba con Dios, también dialogaba con su «ángel de la guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día. No me dejes solo, porque yo sin ti me perdería». Los niños de Ledaña (Cuenca) lo rezábamos al acostarnos y al levantarnos. Me consta que se hacía lo mismo en otros lugares de España y del orbe. Te diré un secreto, yo lo sigo rezando y me gusta recordar aquestas palabras de Jesús: «Si no os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos».