«Janis, buried alive in the blues”.
El 19 de Enero de 1943, en Porth Arthur, Texas, nacía una mujer que se convertiría en un símbolo de la contracultura y la primera estrella femenina del Rock & Roll, Janis Joplin. Tras un breve matrimonio con Peter LeBlanc, conoció al productor Chet Helms quien la incluyó en el proyecto “Big Brother and The Holding Company” que en 1966 grabó su primer disco.
La ruptura entre Janis y Peter LeBlanc marcaría aún más su inseguridad afectiva y su sentimiento de soledad, mas el éxito de esta agrupación volvió a elevar la autoestima de Janis que comenzó a cuidar su aspecto y a aceptar presentarse en vivo acompañando a sus viejos amigos de The Grateful Dead y Jefferson Airplane. Sin embargo, el dolor por la infidelidad de su prometido seguía rondando en sus neuronas, ya revueltas por sus complejos.
El 3 de octubre de 1970 había sido un buen día. Joplin visitó el estudio de grabación Sunset Sound Recorders en Los Ángeles, para escuchar la parte instrumental de Buried alive in the blues. Todo salió bien y, para celebrarlo, se fue de copas con sus compañeros. Es cierto que bebió en exceso. John Cooke decidió visitarla al día siguiente y encontró su automóvil Porsche descapotable en el aparcamiento. Al entrar en la habitación del hotel Landmark Motor, allí estaba, muerta, tirada en el suelo a un lado de su cama. Una sobredosis de heroína, probablemente bajo los efectos del alcohol. Según el estudio forense, murió a la 1:40 h del 4 de octubre, confirmando la sobredosis..
Su última canción fue un presentimiento de su realidad que recorrería toda la eternidad: “Enterrada viva en el blues”. El blues era el desahogo de Janis, quien en esta última canción apelaría a la bondad de Dios. La canción Buried alive in the blues, letra que escribiera la propia Janis Joplin junto a Mike Bloomfield, quedó inconclusa con la trágica muerte de la cantante, aunque fue finalmente incluida como un tema instrumental en Pearl, a manera de un homenaje póstumo. Tenía veintisiete años.
“Estoy enterrada viva, que alguien me ayude, en el blues.
No puedo ser la que acepte toda esta culpa.
Algo aquí está tratando de contaminar mi cerebro.
Enterrada viva en el blues.
Es muy difícil, sabes, es muy difícil ser enterrada viva”.
En mi libro Cuaderno de Blues, publicado por la editorial Devenir Poesía y Ensayo (Madrid 2022), expongo, en la página 21, el sentimiento de su pérdida. Joplin fue un símbolo femenino de la contracultura de la década de 1960 y la canción reflejaba una última expresión de su desarraigada amargura.
Buried alive in the blues
Enterrada viva en el blues
con el verano arruinado,
la Perla,Janis,profirió su último suspiro.
Oh Señor, ¿no me comprarás un Mercedes Benz?
“Buried alive in the blues”
fue el silencio, la voz muda
de aquella canción truncada.
La heroína floreció
en el polvo de la muerte.
¡Cuento contigo, Señor!, dice Joplin protestando.
El pueblo piensa que canta y Janis llora su caída.
(¡Por favor, no te olvides!).
I'm counting on you, Lord! Please don't let me down.
Cuento contigo, Señor, por favor,
no me defraudes.
Adiós, pequeña.
Adiós, niña rebelde.
Won't you buy me a little bit of love?
Sólo, Señor, dame un poco de amor.
Mas-Magro
La soledad
El diario universitario “The Daily Texan, publicó un perfil de Janis en la edición del 27 de julio de 1962, titulado Ella se atreve a ser diferente. El artículo comenzaba:
«Ella va descalza cuando se siente como ella misma, lleva Levi’s a clase porque son más cómodos, y lleva su autoarpa con ella dondequiera que va por lo que, en caso de que tuviera el impulso de romper a cantar, le será muy útil. Se llama Janis Joplin».
Janis Joplin fue la primera mujer en ser considerada una gran estrella del rock.
Maravilloso. Me refiero a tu artículo y a tu poema. Y a la canción de Janis Joplin cuando se cumplen 55 años de su muerte.. Sensacional. Un abrazo.
Gracias Ramón. Janis, creo, fue una víctima de un tiempo que fue también nuestro. Una cantante a quien, desde que entré en su música en los años 70 del pasado siglo, la he sentido con una emoción que, en sí misma, era un sentimiento melancólico, al observar cómo el desarraigo del momento, el cambio social mundial, provocaba una anticultura a veces mal encauzada, como fue su caso. Su magnífica voz, que rompía con facilidad; su soledad y su infantil reconocimiento de la necesidad de Dios. (Oh, Dios, ¿no me comprarás un Mercedes Benz..?), la acompañaron hasta su prematura muerte..
In Memoriam.
Gran artículo, Francisco.
Janis entró en el mítico club de los 27 junto a tantos otros, entre los que destacan de su época y de su ambiente musical, Jimi Hendrix y Jim Morrison.
Por cierto, tengo varios libros tuyos, entre los que está Cuaderno de Blues, que me gustó.
Un abrazo.
Gracias Juan Antonio. Querido amigo.
Un abrazo.