Bartholomaeus Anglicus o Bartolomé el inglés fue un fraile franciscano del siglo XIII que se pasó toda la vida escribiendo las cosas que se sabían por entonces y nos dejó nada menos que la primera enciclopedia como Dios manda, un antecedente de los buscadores y el ChatGPT y demás. El liber “De proprietatibus rerum» era una recopilación del conocimiento antiguo y del teocentrismo dominante de la época, obra magnífica que sirve para conocer el mundo como se veía entonces.
Siempre he pensado que la realidad sólo se parece en algo a lo que de ella trasciende en la historia. Podemos intentar comprender por medio de los más sabios de cada momento una realidad como testimonio y eso es lo que nos llega y, por tanto, creemos que aquellos tiempos eran así como nos lo cuentan. Es lo mismo que si dentro de 200 años, si sobrevivimos al tsunami estúpido que nos invade, alguien leyera nuestros periódicos y sacara su opinión de cómo era nuestro mundo. No sé cuán exacto sería. Pues eso es lo que pienso cuando creemos saber de historia porque leemos lo que se ha escrito y nos dicen que sucedía.
Pero reduciendo al máximo, a veces explico la historia de los últimos milenios así: tras la larga etapa en la que los ejércitos de la mayor dictadura militar que ha habido en la tierra, el Imperio Romano, invadieran, asolaran y diezmaran a todos aquellos pueblos, más bien tribus, que se encontraron a su paso, el mundo perdió la sensación de seguridad que la leyenda de Roma consiguió con la pax romana y con sus ejércitos SPQR. Es cierto que, como bien se señala en la obra de arte La vida de Brian, trajeron las vías, el alcantarillado, los puentes, las obras públicas, los baños, las termas y muchas otras cosas, aquellas que consiguieron copiando lo bueno que vieron, ya que eran listos y con carácter latino y, además, no paraban de conquistar para conseguir retroalimentarse de esclavos que les empezaron a sobrar en un momento dado, pero que ya no sabían hacer otra cosa.
Pero el poder absoluto lleva a la corrupción absoluta y todo lo que sube baja, menos los precios, y así la decadencia y caída de los sucesores de César dura a grosso modo unos 200 o 300 años. Llegó la fantástica Edad Media y entró cierto aire fresco, cierta autonomía, algo de libertad y una gran dosis de miedo, de pánico de aquellos que tenían algo que perder (los ricos también lloran). La sociedad se fortificó, se simplificó y ya nunca más habría ejércitos mundiales que todo lo controlaran, no los ha vuelto a haber.

Ese nuevo orden de pastores, perros y ovejas era tan simple y fácil de comprender que triunfó y duró más de 1000 años. La institución más extendida y fuerte después de Roma tomó ese poder superestructural, que diría un marxista puro, y así la Iglesia cristiana tomó el relevo para amansar la sociedad y para salvar su alma: sus perros, los nobles, defendían al ganado que, a su vez, no podía desmandarse ya que el perro también y básicamente vigila y dirige a las ovejas mientras que el pastor (única figura humana en la trilogía medieval) es el que decide, manda al perro y es el dueño del rebaño. Este último solo tiene que laborar, trabajar para sostener a pastores y perros y a ellos mismos. Hay que decir que la Iglesia, como hizo Angelicus, transmitió el conocimiento y, gracias a ella, nos ha llegado el saber antiguo y medieval, asunto impagable y poco reconocido.
En esa etapa medieval hubo un episodio de calor intenso, calentamiento global sin CO2, que aumentó las cosechas y también fue parte de la extensión de enfermedades y pandemias que diezmaron las poblaciones. El auge del comercio, las ciudades y el calor fueron determinantes para la extensión de las pestes, como la de 1348 que dejó a Europa temblando. La ciudad, el comercio o la irrupción de nuevas formas de vida abrieron nuevas reglas de convivir en esa sociedad y se rompió el rebaño; y aunque una gran mayoría siguió en ese esquema, entró el dinero en el cotarro y la burguesía, nueva clase social, cambió el status quo y tardó “cerocoma” en aliarse con el poder noble y eclesiástico para quedarse el hábitat que dominaba, por lo que ciudades, puertos, barcos, carros o industrias incipientes ampliaron el mundo con sus compraventas. Destrozaron en un periquete bosques y recursos pero, como la población mundial de ese mundo conocido era constante y crecía muy lentamente todavía, existía un planeta donde la naturaleza dominaba los designios del hombre, como siempre fue hasta que aparecieron Oppenheimer, Truman & Cía.
Pero, con todo, salimos más fuertes y cuando cambiaron las cosas, eso que llaman el Renacimiento, no se les ocurrió otra cosa que renacer al Imperio de Roma y empezamos a hacer los horteras en el arte y en la cultura y a pensar que esa parte de la vida de la humanidad que es la cultura es cosa de élites y de los que pueden permitírsela y así ha llegado hasta nosotros que, salvo excepciones mínimas y contablemente despreciables, seguimos en estancamiento social por nacimientos en una proporción mucho mayor de lo que creemos.
Los grandes méritos hoy son para actores, cantantes, deportistas y políticos, y se miden sólo por poder y dinero o dinero y poder. ¡Qué cutre! A lo mejor pensamos que seguimos siendo algo más que borregos y que nuestros impuestos (un gran invento de los Faraones egipcios) son para ayudar a los que no pueden pagarse lo básico. Hoy los pastores han cambiado, pero dominan con sus perros a las ovejas, eso sí, con mando a distancia.












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Pedro: me gusta el complejo y rico cuadro que has pintado, pero me preocupa el contenido presente y el que dibujas para el futuro. Pero es lo que hay; no nos engañemos. Aunque creo que lo que más ha cambiado ha sido la Iglesia y puede que en ella, pese a ciertos problemas, haya que confiar para que todo cambie. Lo demás no es que esté algo confuso, es la confusión total, la mentira, el engaño, el puro y amoral materialismo… Un saludo cordial.
Hola Sr. es el mio un resumen muy resumido, pero la verdad es que estaría bien que la lucha fuera por extender la cultura más y mejor, esto haría conocer bien lo hecho por las instituciones en la historia con sus luces y sus sombras , pero no solo basados en la oscuridad. eso daría las versiones de las cosas y no lo aceptado a conveniencia de unos u otros. Un abrazo.
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